Cuadernos PyP 92 Robert Paris. La formación ideológica de José Carlos Mariátegui
Debido a esto, el presente trabajo tiene algo de apuesta. Sin duda, si es verdad que la obra de Mariátegui comienza por fin a hacer pie en Europa, también se trata de contribuir a este conocimiento. Pero en principio, y a riesgo de que esto sea tachado de humanismo, nos ha parecido que el mejor medio de contribuir a este conocimiento -que creemos profundamente indispensable- consistía, en alguna medida, en rehusar todo tipo de exotismo y en evaluar esta obra a la medida de las referencias que conscientemente ella misma se ha otorgado; referencias europeas, nombres como los de Marx o Lenin, Gramsci, Gobetti o Croce, Sorel, Engels, Jaurès o Freud. Mariátegui, dicho de otra manera, no representa aquí una nueva variedad del Huron de Voltaire o un Atala que se habría convertido en marxista, sino un momento de una cultura que, el imperialismo mediante, se define cada vez más como cultura mundial.
No se trata de que Mariátegui no haya sido -como sus adversarios le reprocharán- más que un «europeizante». Lo que es «europeo» en él es la referencia al socialismo. Pero él mismo precisa que «el socialismo, aunque haya nacido en Europa, como el capitalismo, no es tampoco específico ni particularmente europeo. Es un movimiento mundial». Y es esta referencia incesante al socialismo, nacida y aprendida en Europa, la que le permite precisamente ver y comprender, incluso descubrir y casi «inventar», la «tragedia […] de Hispano-América». Es aquella la que le permite al mismo tiempo dar con ese problema del indio que constituye, para él, «el problema primario del Perú». y rechazar, respecto de este mismo problema así como seguramente de otros, todas las soluciones «europeizantes», es decir, en última instancia favorables a la penetración imperialista, que hasta entonces se ofrecen para el Perú y para el resto del continente iberoamericano.» (De la Introducción)
Cuadernos PyP 92 Robert Paris. La formación ideológica de José Carlos Mariátegui