Crisis del capital (2007/2013) : la crisis capitalista contemporánea y el debate sobre las alternativas – Julio C. Gambina
«Abordar el análisis de los temas relevantes de la crisis del capital en sus múltiples facetas considerando la interdependencia entre países centrales y países periféricos constituye una virtud en sí mismo. Si a eso se suma el hecho de hacerlo utilizando el instrumental analítico adecuado, la economía política, ese
mérito es aún de mayor envergadura. Si, además, el estudio se efectúa desde una perspectiva honesta y de mente abierta, con un enfoque clasista sólidamente fundamentado pero que, sin embargo, no pretende tener “la verdad revelada”, el esfuerzo adquiere una validez aún más considerable. Estos factores caracterizan a la propuesta que Julio Gambina presenta para su discusión.
El análisis de la “ofensiva del capital” iniciada a principio de los setenta desde una perspectiva marxista se enmarca en un intento de discutir y profundizar un aspecto clave de la economía capitalista: la tendencia decreciente de la tasa de ganancia y los mecanismos para contrarrestarla. Como contrapartida, describe y contrapone las respuestas elaboradas e implementadas desde el campo popular: tanto, las medidas de resistencia sindical, campesina, estudiantil y de los pueblos originarios; como, el desarrollo de proyectos alternativos, en particular el acceso de fuerzas políticas “progresistas” al gobierno en varios
países de América Latina.
Discrimina claramente entre los proyectos que pretenderían transcender el horizonte capitalista y los que buscarían “humanizar” el capitalismo. Sobre estos últimos es contundente respecto a la inviabilidad de modificar la lógica concentradora y excluyente del capital. En cuanto a los primeros su análisis reconoce y describe límites y potencialidades en cada uno de estos procesos, pero descarta que exista un punto de inflexión negativo y sostiene que es un final abierto que depende básicamente de dos factores: por un lado, la conciencia, organización y dirección del movimiento popular en Nuestramérica en el marco de la unidad de naciones; por otro lado, la ofensiva económica, política y militar de los Estados Unidos para desestabilizar y derrocar los gobiernos de Bolivia, Ecuador y Venezuela, al igual que lo hicieron en Paraguay y Honduras.
El texto tiene un conjunto ordenado y preciso de hipótesis que van acompañadas de las fundamentaciones correspondientes y, lo que no es menor, un número importante de preguntas que imponen una agenda de investigación y discusión amplia y abierta. Y precisamente porque la propuesta tiene esas características, abre caminos a la reflexión y no los cierra con respuestas dogmáticas, es que no se requiere coincidir con todos los términos de la misma.
Aunque parezca paradójico, ése es quizás uno de los aspectos más destacables y atractivos de esta obra su capacidad de interpelar al lector desde un análisis riguroso y preciso.
Justificar la importancia del tema abordado en este libro parecería ser ocioso. Hay varios ejes temáticos que aparecen y se desarrollan en las diversas partes del texto. Por un lado, se analizan las reiteradas crisis capitalistas y sus mecanismos de salida hasta llegar a la crisis actual de sobreproducción que aún no tiene ninguna luz al fi nal del túnel. Por otro lado, se describe la enorme expansión capitalista con la incorporación de China y los países que integraron la Unión Soviética. El papel de las transnacionales como agentes fundamentales de este proceso en directa asociación con sus Estados nacionales de origen.
Los procesos de luchas y derrotas de Nuestramérica enfrentada a una agresión permanente y, en particular, el cuidadoso análisis de la situación actual en los países que pretenden trascender el capitalismo. En ese marco la permanente referencia al gobierno y al pueblo de Cuba como ejemplo de que la victoria es posible, sin desconocer las enormes dificultades de la revolución en un solo país.
El proceso económico, político y social de la Argentina es objeto de análisis en el última parte de este texto, la toma de partido es clara fundamentada en contra del modelo de acumulación y de legitimación que han implementado los tres últimos gobiernos.
El estudio de los temas señalados desde una óptica que combina el dominio teórico de la economía política, el manejo riguroso de las variables económicas y un preciso análisis de las cambiantes correlaciones de fuerzas políticas y sociales en nuestro continente revisten fundamental importancia y, son justamente esos aspectos lo que hacen a la presente propuesta novedosa.
Este libro supera claramente a la mayor parte de los estudios económicos que se desarrollan en nuestros países, en tanto la consideración permanente de la luchas de clases permita superar una carencia sustancial del pensamiento dominante –que analiza la complejidad social reduciendo los hombres y mujeres de nuestros países a meros agregados estadísticos o a las categoría de consumidores en un mundo económico donde las únicas leyes se derivan de las relaciones entre oferta y demanda–. Tiene, obviamente, un carácter esclarecedor respecto a visiones que buscan soluciones económicas supuestamente en defensa de los intereses de los trabajadores asumiendo que existe un capitalismo
“bueno”, “serio”, “confiable” que hay que potenciar, olvidando las cruentas leyes del sistema capitalista.
Una vez que se explicitan, como se hace en este texto, las restricciones que tienen los modelos económicos que desconocen el carácter dialectico de los procesos sociales y que ocultan el papel del Estado como reproductor y garantía final del sistema, se abre un campo reflexivo, no menor, sobre el papel de dicho Estado en los procesos de cambio. Ese tema es abordado en todas y cada una de
las partes de esta obra.
La obra de Julio Gambina adquiere una singular dimensión porque refleja y sintetiza los trabajos de un teórico y docente especializado en economía política, de un militante fuertemente ligado al movimiento sindical y de un activista político comprometido con los intereses de las clases oprimidas de Nuestramérica.
Por eso, este libro, es muchos libros, tantos como nuestra capacidad para recorrer con pensamiento crítico los procesos de refl exión que desarrolla el autor con certeras hipótesis y cuidadosas preguntas.
Montevideo, 17 de junio de 2013» (Prólogo de Antonio Elías)