Aprieta poco a poco, de golpe se pierde el anonimato
Juan Luís Rodríguez
«La igualdad de la riqueza debe consistir en que ningún ciudadano sea tan opulento que pueda comprar a otro, ni ninguno tan pobre que se vea necesitado de venderse». Rousseau
Sabemos que nuestra deuda ya es impagable (eso para los mercados internacionales es una gran noticia puesto que nos hace absolutamente dependientes de esos prestamistas internacionales).
Sabemos que pedimos ya dinero prestado para pagar intereses de otros préstamos anteriores (eso para los mercados internacionales es una gran noticia puesto que nos hace absolutamente dependientes de esos prestamistas internacionales).
Sabemos que el origen de toda esta marea de «recortes» no es el ajuste del déficit. Las políticas de ajuste de déficit sólo son un «concepto» para proporcionar aire técnico a lo que es un desfalco y una apropiación por parte de los bancos sobre el dinero público (ya no hay dinero público para ponerlo al servicio de la gente. Este se le ha dado a los bancos, y de ahí los llamados «recortes»). Esto también es una gran noticia para los mercados internacionales, porque permite que el auténtico origen de la desgracia permanezca oculto a la gente y los mercados pasen por salvadores.
Nos decían que rozábamos el nivel de ser considerados como un país basura y que nuestra emisión de deuda sería despreciada por los mercados internacionales.
Que corríamos el peligro de no poder vender nuestras emisiones de deuda (fuera cual fuera el interés que pagáramos) porque los mercados internacionales no darían credibilidad a que pudiéramos devolver el dinero.
Llega la hora de la verdad y todo es mentira.
Hemos vuelto a emitir deuda, a un nivel de interés (el que pagamos todos los ciudadanos/as) que es el segundo más alto que hemos pagado hasta el momento.
Nos hemos endeudado por 3.560 millones de euros más.
Lo importante del tema, y que demuestra toda la mentira y basura a la que nos están sometiendo es que, si por los mercados internacionales hubiera sido, nos habrían comprado 9.300 millones de euros. Es decir, casi el triple de lo que hemos adjudicado.
Es decir, quieren que nos endeudemos más, más y más…ese es el origen del asunto.
Mientras tanto en la realidad de tu entorno y tus calles, en la realidad de los trabajadores/as de nuestro país, nuestro empleo y nuestras riquezas…fíjate todo lo que está pasando.