Humanidad glacial
Antonio Ruiz
La zona de interés; Título original: The Zone of Interest; Año: 2023; Duración: 106 min.; País: Reino Unido; Dirección: Jonathan Glazer; Guion: Jonathan Glazer (basado en la novela de Martin Amis); Reparto: Sandra Hüller, Christian Friedel, Ralph Herforth, Max Beck, Marie Rosa Tietjen; Sinopsis: El comandante de Auschwitz Rudolf Höss y su esposa Hedwig se esfuerzan en construir una vida de ensueño para su familia en una casa con jardín cerca del campo.
Érase una feliz familia, matrimonio y cinco hijos de tres meses a quince años, que vive en un lugar rural y en contacto con la naturaleza; lago, río, campiña. Una agradable casa con el servicio doméstico, con bonito jardín, cuidadas plantas florales, piscina e invernadero…pero, el muro del jardín es el exterior del campo de concentración de Auschwitz y el padre de familia es Rudolf Höss, coronel de la SS y comandante del campo ascendido más tarde a inspector de todos los campos de exterminio nazi. El permanente humo de las chimeneas que calientan las cámaras de gas, plenas de seres humanos invaden el ambiente.
Este es el arranque del largometraje, con guion libre sobre el libro del mismo título de Martin Amis (2015) fallecido hace unos meses, que nos presenta el director y guionista Jonatha Glazer.
Nunca me he sentido a gusto viendo cine que trata temas históricos cercanos, pero el planteamiento que se expone tiene su originalidad, que no por eso es menos inquietante. Solo en un plano se intuye que el personaje principal está dentro del edificio genocida, donde se capta en contra picado la cabeza y permanente humo de las chimeneas. Ni una sola imagen de lo que hay y ocurre dentro del campo. La acción se centra en el grupo familiar disfrutando del buen tiempo: salidas a la campiña, al rio, paseo a caballo, comidas con los invitados y enseñar la casa a la abuela. Pero también muestra elementos discordantes que nos sitúan la realidad de los personajes y su función. La esposa contenta con su casa, que no quiere abandonar, se prueba y se adueña la ropa elegante que le traen de las prisioneras/victimas. Los niños se entretienen coleccionando los dientes de oro de los asesinados. La abuela abandona la casa dejando una nota. Una hija tiene problemas de ansiedad y para conciliar el sueño. Höss se presenta como un personaje de opaca mentalidad por su educación nazi.
La película es; compleja, inquietante, sobria, distante y de frio ambiente que nos dice más que las palabras y nos sitúa claramente en la tragedia humana histórica que se expone: lo que puede llegar a hacer un ser humano con su misma especie.
El director con su guion realiza un estilo original de exponer la síntesis de un hecho real, que considero acertado por lo novedoso, y la sensación que causa a quien ve la cinta: ausencia de violencia física en las imágenes y toda la que los espectadores puedan sentir internamente durante su proyección.
Para dar un toque de realismo, en las últimas escenas, nos expone los espacios que nunca se ven durante la ficción cinematográfica. Otra originalidad.
Mientras veía la película no podía dejar de pensar en lo que está ocurriendo en Palestina: un genocidio realizado por una cultura que nada aprendió de la historia. La soberbia irracional del poder se come a su especie.
Buena realización y digna de ver, si se considera de interés.
